La Punción Seca es un técnica semi-invasiva que utiliza agujas para el tratamiento del dolor miofascial, que se produce por contracción reiterada de un músculo.
El dolor miofascial está provocado por la activación de los puntos gatillo que se encuentran en los músculos afectos. Además de dolor, todo ello causa restricción de la movilidad y alteraciones sensitivas.
Estos puntos gatillo se pueden activar por diferentes causas tales como traumatismos, estrés, sobrecargas musculares, etc.
¿QUÉ ES EL SÍNDROME DE DOLOR MIOFASCIAL (SDM)?
El síndrome de dolor miofascial tiene como presencia los puntos gatillo miofasciales (PGM) o nódulos hipersensibles en una banda tensa del músculo. Producen un dolor local y referido, que cuando lo tratamos da lugar a una respuesta de espasmo local. (REL- contracción súbita, momentánea y espontánea de las fibras musculares de la banda tensa).
TÉCNICAS Y TRATAMIENTO CON PUNCIÓN SECA
Con la Punción Seca lo que buscamos es desactivar estos puntos gatillo. Esto se consigue mediante la introducción de la aguja en la banda tensa. Al mismo tiempo se obtienen respuestas de espasmo local, disminuyendo el dolor y mejorando el movimiento.
- Punción superficial: Se introduce la aguja a una profundidad máxima de 1 cm en el tejido celular subcutáneo, sin llegar a penetrar en el músculo. Tras la punción, se realiza tratamiento conservador sobre el punto gatillo, que eleva el umbral del dolor y facilita el tratamiento.
- Punción profunda: Las agujas se introducen hasta alcanzar el punto gatillo. El tamaño de la aguja depende de la profundidad a la que se encuentre el músculo. Los giros y la introducción – extracción repetida produce la estimulación. Posteriormente se utiliza otro tratamiento superficial.
Además es necesario acompañar la punción seca con otras técnicas o tratamientos (conservadores o superficiales). Por ejemplo: aplicación de sprays de frío y estiramientos, fisioterapia, contracción voluntaria del músculo y liberación por presión.
Eva Huertas
Nº colegiado–2183
