A la hora de distinguir entre un niño con TDAH y un niño sin TDAH, es importante tener en cuenta la cantidad e intensidad de los síntomas, su permanencia en el tiempo y en diferentes situaciones.
En los casos de TDAH, las conductas hiperactivas e impulsivas, así como los síntomas de inatención, son (según la Guía de consulta de los criterios diagnósticos del DSM 5. Arlington, VA, Asociación Americana de Psiquiatría. (2013): Evaluación del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad):
- Síntomas que causan alteraciones presentes antes de los 12 años.
- Síntomas de inatención o hiperactivo-impulsivo que están presentes en dos o más contextos (p- ej. escuela, casa, trabajo, con los amigos o parientes; en otras actividades).
- Síntomas que interfieren con el funcionamiento social, académico o laboral, o reducen la calidad de los mismos.
- Síntomas que no se producen exclusivamente en el transcurso de una esquizofrenia o cualquier otro trastorno psicótico, y no se explican mejor por otro trastorno mental (p. ej. trastorno del estado de ánimo, trastorno ansiedad, trastorno disociativo, trastorno de la personalidad, intoxicación o abstinencia de sustancias).
Por ello es necesario conocer algunas de las características que presentan estos niños así como conocer los signos de alerta que nos pueden ayudar a establecer un diagnóstico preciso lo antes posible.
Los síntomas del TDAH se encuadran en tres categorías:
• Tiene dificultad para organizarse
Hiperactividad